No sé que tienes tú, que me tienes pensando en tí por tanto tiempo, aún cuando tu rostro se desvanece de mi mente, aunque no haya oido tu voz ni tu risa en meses, ya deberías ser sólo una fraccion de memoria.
He tratado de mil maneras de borrarte de mí, de pretender que no quiero saber de tí cada vez que oigo tu nombre o alguien te menciona, o que no me importas; que no muero de ganas de ver tu cara de emoción cuando sacas fotos o hablas con tu hermano.
Es un riesgo. No sé si sería capaz de soltarte si hubiera oportunidad de abrazo, esos abrazos tuyos. No sé si sería capaz de ocultar la cara de embobada que siento que pongo cuando te veo, cuando te oigo, cuando estas cerca. Cuando estabas cerca.
Incluso hay momentos donde me arrepiento de haberme alejado de tí, de haberte dicho lo que sentía. son breves, pero existen. Despues siempre viene el recuerdo de que tú no sientes lo mismo, eso me mantiene un poco mas cuerda.
Te quiero. Aunque no estés cerca, aunque no me recuerdes, aunque no sea de tu gusto.
Realmente espero con cada parte de mi ser, incluidos los pedazos que rompiste, que seas feliz y que estés bien.
Algún día quizás ya no sea necesario vaciar mis sentimientos aquí para no reventar.
Gracias por olvidarme.
No hay comentarios:
Publicar un comentario